Foto cortesía: Jessika Paz
Durante todo el mes de marzo en Venezuela y el resto del mundo se estuvieron realizando diferentes actividades en el marco de la conmemoración del Día Internacional de la Mujer, como cada Año desde que la Asamblea General de las Naciones Unidas lo estableciera formalmente en 1977 [1], como un homenaje a todas las luchas libradas por los movimientos de mujeres a lo largo de la historia.
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Debido al contexto de la actual pandemia de COVID19 y la agudización de las restricciones de movilidad, fueron muchas las actividades planificadas en entornos virtuales. Sin embargo, las restricciones no fueron una limitante para que la calle también fuera un escenario para conmemorar las luchas y protestas de las mujeres.
Las mujeres desde lo virtual, la literatura y la educación
En Venezuela quizás una de las actividades virtuales más notorias fue la realizada por las organizaciones feministas Mulier, Resonalia, Feminismo Inc., Proyecto Mujeres, Venezolanas Globales y Mujeres Migrantes.
Quienes con el fin de hacer la protesta accesible se unieron y habilitaron una plataforma de protesta virtual para que las personas pudieran expresarse bajo la etiqueta #NoMás. Además, diversas agrupaciones de mujeres y feministas dictaron talleres y conferencias virtuales; y llenaron las redes de protestas contra la violencia de género y los múltiples femicidios ocurridos durante el 2021 bajo las etiquetas #NiUnaMenos y #NiUnaMás.
Marzo también coincidió con el lanzamiento de “Doble crimen”, el libro de Linda Loaiza en coautoría con Luisa Kislinger, donde no solo se cuentan las terribles violencias a las que fue sometida hace 20 años, también se narran todas las luchas que tuvo que librar contra la negligencias del Estado venezolano en torno a su caso.
Un libro que está destinado a convertirse, al igual que su protagonista, en un símbolo de la lucha de las mujeres ante la violencia de género imperante en nuestra sociedad. [2]
Sin duda alguna, las protestas de calle en todo el país fueron las protagonistas.
Mujeres a la calle en Venezuela
Aún cuando el ejecutivo nacional, dos días antes del 8 de marzo, anunciara en cadena Nacional que por la llegada de la nueva variante en el COVID- 19 se imponía la cuarentena radical y quedaban suspendidas todas las actividades de calle, organizaciones feministas de Táchira, Zulia, Bolívar, Portuguesa, Falcón, Mérida, Anzoátegui, Carabobo, Monagas y de toda la Región Capital salieron a las calles a alzar sus voces.
En Caracas se realizaron tres protestas importantes, con alcance mediático a nivel nacional
-La primera de ellas fue la convocada por el Frente Amplio de Mujeres junto a la sede del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) en la urbanización Los Palos Grandes, donde mujeres políticas, enfermeras y diversos sectores de la sociedad civil, alzaron sus voces para protestar en contra de los femicidios.
En esta concentración también se hizo entrega de un comunicado a los oficiales de la Oficina de la Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos. Con el objetivo de solicitar medidas para la liberación para 17 mujeres que se encuentran presas por razones políticas.
-Un poco más tarde diferentes organizaciones autónomas feministas y de mujeres, defensoras de derechos humanos y activistas independientes se concentraron en la plaza Brión de Chacaíto.
– Por otro lado un grupos de organizaciones feministas que simpatizan con el gobierno nacional se apostaron a las afueras del Capitolio en el centro de Caracas, exigiendo a los diputados y diputadas la incorporacion de la discusion sobre la despenalización del aborto.
Las tres protestas desarrolladas en Caracas aunque protagonizadas por distintas agrupaciones con poca afinidad politica/ideologica lo más relevante es que todas tuvieron el foco o en la cantidad de femicidios ocurridos en Venezuela en los últimos años, 610 desde el 2017 hasta 2020 según las más recientes declaraciones del Fiscal General de la República Tarek William Saab [3], las exigencias fueron muchas.
Seguridad, acceso a servicios básicos, acceso a la salud, salarios dignos, mayor representación en la política, Estado laico, reconocimiento de los derechos de las personas pertenecientes a la comunidad LGBT+, casas de abrigo para mujeres vulnerables, funcionarios sensibilizados y preparados para atender las denuncias de mujeres víctimas de violencia, educación sexual para decidir, anticonceptivos para no abortar, aborto legal seguro y gratuito para no morir, entre otras. [4]
Venezuela llena de color
Una de las características más importantes de la concentración de la Plaza Brión en particular, es que estuvo tan llena de color y diversidad que por un momento hizo olvidar a los asistentes allí reunidos la fuerte polarización instalada por los sectores políticos en Venezuela.
Las banderas de algunas representantes de sectores opositores se posaron al lado de las de algunas representantes de sectores oficialistas y no hubo más protagonismo que el de las mujeres rebeladas en su día.
Algunas de las organizaciones presentes en la concentración fueron: Mujeres, Cuerpos y Territorios, WELab, Pan y Rosas, Uquira, Mujeres en Lucha, Labo Ciudadano, Las Comadres Púrpuras, Hombres por la Equidad e Igualdad, AMBAR, CERLAS, Mujeres Radio, entre otras.